Oscuridad total, ya están apagadas las luces de la ciudad, el miedo en cada esquina se oye palpitar. Caminante solitario recorre la ciudad, su sombra de luna le sigue sin dudar. Y allí al girar, un encapuchado le había de esperar. Más quien debería ser no fue. A la muerte en persona fue a ver
miércoles, 10 de agosto de 2011
martes, 9 de agosto de 2011
Realidad
El tintineo de miles de trocitos de cristal me golpea hasta dejarme sin aliento. Mis ojos ven como se quiebra mi alma, mientras el suelo firme desaparece bajo mis pies y caigo en una espiral de oscuridad. Miles de voces susurran a mí alrededor, pero yo no puedo escuchar nada. Como Aurora en mi sueño sumida, deseando estar aquí en este remanso de paz, donde viven los dragones, y las sirenas pueden cantar. Pero la vida no es justa, y despierto en el hospital con el zumbido del electro. No hay nadie en la sala. ¿Por qué no podré volver atrás?
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